Pocas palabras se necesitan para describir a este templo de la gastronomía. Un local de toda la vida, escondido en una callejuela y cerca de la Basílica de la Mercè. Ya lo dicen ellos en la pizarra del menú, sin temor a la réplica: riquísimo. Si no hace falta decir nada más. ¿Y las raciones?Pues generosas y contundentes.
Guardad bien el secreto, que no se enteren los visitantes de otros lares de la existencia del Bidasoa.
2 comentarios:
m antes de b....nembrillo con m, sino será nen....brillo ¡¡¡; riquissimo parece italiano, con una s me basta. Y si vais a un restaurante y te ponen "parnigiana", eso no lo hace ningún italiano, siempre es parMigiana, porque la región de Parma Raggiano, es esa Parma y no ParNa...en fin...en 5 frases está todo dicho, otra cosa será que se come bien y además es económico, pero aquí ya no entro...salut
El estómago no entiende de abecedarios o de normas ortográficas/gramaticales. En serio que vale la pena.
Publicar un comentario