Al pasar por delante con mi moto el jueves de la semana pasada, antes de girar por Pau Claris, de repente un pequeño trozo de París se quedó grabado en la retina.
En la esquina de carrer València y a dos pasos de Passeig de Gràcia se ha estrenado hace muy pocas semanas Épicerie, el nuevo establecimento de Romain Fornell, chef de Caelis. Un café-pastelería muy agradable y tranquilo lleno de reminiscencias gastronómicas del país vecino.
Ya desde el exterior se respiran aires parisinos que dentro se confirman en los detalles de la decoración. Para estar en pleno centro de Barcelona, los precios son más que razonables: esta mañana un café por 1,10€ más un trozo de pastel de zanahorias, 1,40€ (riquísimo, por cierto).
Sólo un pero: siendo un local tan tan tan francés, que los cartelitos del interior, aquellos que comunican precios, productos, ofertas del día,... omitan este idioma, sorprende.
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