Amaia Arrazola decidió, recién instalada en Barcelona, que quería reflejar su nuevo día a día en la ciudad. Y dicho y hecho, a esa visión le puso nombre: "Amaia was here". 212 días y 212 ilustraciones que muestran lo que sus ojos han ido observando y viviendo en Barcelona.
Ahora podemos ver ese proyecto al completo en las paredes de la sala Miscelanea, en el carrer Guàrdia 10, en el barri del Raval. Recomendable es poco.
Sencillamente, me encanta la manera espontánea y divertida que tiene Amaia de retratar Barcelona.
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